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martes, 26 de abril de 2011

*Día del Trabajo: Ausencia Gubernamental


 VERÓNICA V. GONZÁLEZ Y ARNOLDO PIÑÓN


 La ausencia del presidente Felipe Calderón del país este domingo 1 de mayo en que se celebrará el “día del trabajo”, para asistir a la ceremonia de beatificación de Juan Pablo II en Roma, es clara muestra del insignificante papel que en la actualidad juega el otrora influyente movimiento obrero organizado en el país.
Durante los últimos diez años, el Presidente de la República ha sido en la práctica el gran ausente de una celebración que, por lo menos una vez al año, permitía a los trabajadores hacerse presentes. Con una CTM desarticulada y severamente disminuida, una inexistente CROC y un Congreso del Trabajo convertido en un auténtico elefante blanco, es paradójico que en un país, de mano de obra asalariada abrumadoramente mayoritaria, tengamos un movimiento obrero famélico.
 Los sindicatos son la única opción que los trabajadores tienen para no ser arrastrados frente a prácticas depredadoras de sus condiciones de vida. Y en ese rubro, no se escapa nadie, ni siquiera el gobierno de cualquier color político, el cual en los últimos años ha optado por la contratación de personal mediante modalidades como los honorarios, la eventualidad, el outsourcing y otros, para evadir responsabilidades laborales.
En estos días se ungirá al candidato a ocupar la presidencia del Sindicato Único de Trabajadores del Gobierno del Distrito Federal (SUTGDF), que con una membresía de 100 mil afiliados, es uno de los más importantes de la burocracia nacional. El gobierno de Marcelo Ebrard ha comisionado a dos de sus funcionarios -Justo Federico Escobedo Miramontes y Flavio Ramírez León, director general de política laboral y desarrollo de personal y director de relaciones laborales, respectivamente- para que conduzcan el proceso.
Es probable que ambos desconozcan que el artículo 133, fracción V de la Ley Federal del Trabajo prohíbe a los patrones -y por supuesto también al gobierno cuando tiene esa calidad-, a inmiscuirse en la vida interna de los sindicatos.
Durante muchos años escuchamos que la izquierda cuestionaba el corporativismo sindical. Esa bandera la arrumbaron en un rincón en cuanto ocuparon posiciones de gobierno. Lo paradójico es que se disponen a imponer a Juan Ayala Rivero como candidato, pese a que su historia lo condena. En 2002, era de los que gritaban consignas en contra del gobierno del PRD en la Ciudad de México -”gobierno de izquierda, eres una mierda” decía a todo pulmón-, cuando el titular era Andrés Manuel López Obrador y hacía esfuerzos por destituir a José Medel Ibarra de la dirigencia para imponer a uno de sus incondicionales como lo fue Enrique Hanff Vázquez.
¿Recordarán Ebrard y sus asesores que Ayala Rivero mantenía una relación estrecha con el entonces diputado a la Asamblea Legislativa del Distrito Federal y actual senador Federico Doring?
En realidad entre el gobierno de Ebrard y el de Calderón en materia sindical no existen diferencias sustantivas, por más que el PRD cuestione el proyecto de reforma laboral presentado por el PRI.
Parece innecesario recordar que en 2009, en el ISSSTE fue impuesto en la dirigencia de 70 mil trabajadores José Luis Rodríguez Camacho, quien desde entonces parecía agobiado por la edad y todos los días, a las tres en punto de la tarde se retiraba a descansar, como si las necesidades de los trabajadores estuvieran sujetas a horarios y eso le valió el mote de “burócrata del sindicalismo” que despectivamente le endilgaba Ricardo Pontigo.
En el deterioro público del sindicalismo, los dirigentes han jugado un rol espectacular: la gran mayoría de ellos se han dedicado a enriquecerse escandalosamente, a colocar a su parentela -novias, amigas, compadres, etcétera- en posiciones de privilegio, dándoles la espalda a los trabajadores. En este espacio hemos documentado los excesos en el ISSSTE, por ejemplo.
El hecho que el Presidente de la República se ausente del país el “día del trabajo”, es incomprensible. Quizá se olvida que también los trabajadores y sus familias votan.
¿Cuántos votos representa sólo el SUTGDF? Algunos miles más con los que Calderón ganó su actual posición.
Para la agenda
Lissete Clavel Sánchez, secretaría general de la Asociación Sindical de Sobrecargos de Aviación (ASSA), buscará -pese a tener en contra a las sobrecargos de Aeroméxico-, será reelecta para un periodo más. Su seguridad radica en que cuenta con el voto cautivo de las aeromozas de Mexicana de Aviación, la mayoría de las cuales enfrentan una situación económica desesperada, debido a que tienen que pagar colegiaturas y en algunos casos renta, sin que desde hace meses reciban salarios. La señorita Clavel, dicen los que saben, tiene una importante palanca gubernamental… El secretario general de la sección uno “oficinas centrales” del SNTISSSTE, Hilario Ramírez Chávez, tiene un hermano de nombre Marceliano, quien desde el 1 de marzo del año pasado ocupa la plaza de base número 78967 Apoyo Administrativo en Salud A-3, adscrito a la Subdelegación de Prestaciones de la Delegación Regional Poniente en la Ciudad de México. Sólo que para ingresarlo a trabajar antes debió haber sido inscrito en la bolsa de trabajo, donde tuvieron que estar otros aspirantes que tenían la preferencia por ser primeros en tiempo -el escollo se salvó con la ayuda de la jefa de recursos humanos delegacional, María del Socorro Vivas, del grupo de la exdelegada Ana Aurora Lara Martínez, entre otros-. Pero además se violentó el escalafón, ya que debió haber ingresado con la categoría A-1... El dirigente sindical no es muy escrupuloso a la hora de cumplir con el marco jurídico, quizá porque está más interesado en rendirle culto al dios Baco; Rocío Monroy Gómez goza de comisión sindical al ocupar la Secretaría de Asuntos Administrativos y Técnicos del Grupo Afin de la sección. El 2 de febrero participó en el subcomité de evaluación del desempeño y productividad para designar a los acreedores al premio “trabajador del mes” correspondiente a enero. De cuatro premiados, uno fue ella, pese a que el estímulo -más de mil pesos- se hace con base a la evaluación del jefe inmediato. El acta fue firmada por Patricia Arellano Miranda, jefa de recursos humanos delegacional. Vale la pena preguntar: ¿el delegado Graco Ramírez Garrido García -compadre de la maestra Gordillo- no repara en detalles que lastiman a los trabajadores? Ramírez Chávez parece estar más ocupado en pastorear a los 16 secretarios generales seccionales del SNTISSSTE en el Distrito Federal. El jueves 14 de abril los convocó a una reunión en sus oficinas, bajo el pretexto de tener experiencia en la elaboración de propuestas para el consejo que se realizará entre 12 y 14 de mayo. Sólo asistieron tres: Emigdio Zárate López, del Hospital Regional “Ignacio Zaragoza”; María del Pilar Hernández García, del Fovissste y Teresa López del Hospital Tacuba…

martes, 19 de abril de 2011

*SUTGDF: Botín que Amenaza las Pasiones


POR VERÓNICA V. GONZÁLEZ Y ARNOLDO PIÑÓN

La pretensión del Gobierno del Distrito Federal de imponer la candidatura de Juan Ayala Rivero a la dirigencia sindical de más de cien mil trabajadores de base se ha traducido en una profunda división que amenaza con desbordarse. El dirigente saliente Enrique Hanff Vázquez fue el primero en oponerse a la propuesta.
El director de desarrollo de personal y política laboral, Justo Federico Escobedo Miramontes y el director de relaciones laborales, Flavio Ramírez León, tienen a su cargo la encomienda de que Ayala Rivero ocupe la presidencia del Sindicato Único de Trabajadores del Gobierno del Distrito Federal (SUTGDF) a partir del 11 de julio próximo.
 Para alcanzar el propósito, aseguran que tienen el apoyo de 35 secciones de 39. Pero hay un detalle: por lo menos una docena de esas secciones impulsan la propuesta de que el candidato sea un secretario general o que en su defecto aceptan que Ayala Rivero ocupe la presidencia pero ellos definan la distribución de las carteras del comité ejecutivo general.
El miércoles 6 de abril fueron convocados a la oficina de Escobedo Miramontes para, supuestamente, anunciarles la candidatura de Ayala Rivero. En una reunión previa antes de arribar al séptimo piso de Fray Servando Teresa de Mier número 77 votaron si estaban de acuerdo en asistir. Ahí se puso de manifiesto que no hay unanimidad en cuanto a quien el gobierno de la ciudad pretende imponerles como dirigente sindical. Al final descubrieron que oficialmente no habían sido llamados.
Un error de Ayala Rivero, al plantear que ni Ricardo Anguiano ni Álvaro Dethor formen parte de la siguiente dirigencia sindical, prendió la alarma en el grupo de Hanff, situación que pudiera torpedear su postulación, debido a que forman parte de la corriente Izquierda Social que lidera Martí Batres Guadarrama, secretario de Desarrollo Social y uno de los precandidatos de Andrés Manuel López Obrador a la jefatura de gobierno para las elecciones de 2012.
Ese grupo -al que aparentemente se sumaría Izquierda Democrática Nacional que lidera René Bejarano-, busca generar condiciones que le permitieran a Aarón Ortega Villa ser el candidato o en su defecto a Miguel Ángel Patlán. Para lograrlo, pretenden explotar la cercanía que Ayala Rivero mantuvo hace unos años con el senador del PAN, Federico Döring.
Quizá por esas circunstancias, el viernes siguiente Miramontes Escobedo dejó entrever que analizan un escenario en caso que la precandidatura que impulsan no se consolide. De acuerdo con esa perspectiva, sólo dos secretarios generales en funciones reúnen el requisito de haber formado parte de la dirigencia sindical.
Otro error de Ayala Rivero pudo haber sido que el lunes 11 de abril se reunió con el director de Recursos Humanos de la Secretaría de Finanzas, José Luis García Martínez, buscando que le disciplinara a los dirigentes de las secciones 11, 30 y 39. Sólo que además de que el funcionario forma parte del grupo de Mario Delgado, distanciado de Miramontes Escobedo y Ramírez León, circulan copias de una denuncia de venta de plazas -25 mil los interinatos y a 70 mil las de base- en la que es señalado por Luis Israel Medina Mosqueda.
La precandidatura de Ayala Rivero, al parecer tiene como principal apoyo al presidente nacional del PRD, Jesús Zambrano, quien habría generado condiciones para que fuera el único considerado por el gobierno de Marcelo Ebrard para ocupar la posición.
El parentesco con el dirigente de la Federación de Sindicatos de Trabajadores al Servicio del Estado (FSTSE), Joel Ayala Almeida -es su sobrino- no ha jugado hasta ahora ninguna influencia en el relevo de la dirigencia sindical.
Las expectativas es que la postulación a la presidencia del SUTGDF ocurra en los siguientes diez días.
PARA LA AGENDA
Marisol Galindo la única con liderazgo en el Sindicato Nacional de Trabajadores del ISSSTE, sigue consolidándose frente a la apatía y mediocridad de José Luis Rodríguez Camacho, quien en lugar de atender los cada vez mayores reclamos de los trabajadores, les rehúye a los problemas. Apenas el domingo 3 y el jueves 7 de abril, estuvo en Bogotá, Colombia, para atender una reunión de la organización Uniaméricas. La representación de la organización la llevó el secretario de Relaciones Sindicales Internacionales, Ramiro Tena. Sin embargo, fue una buena oportunidad para pasear y olvidarse del caos que impera en su organización, donde la ausencia de su trabajo ha provocado que quienes creen que dentro de dos años podrían ocupar su lugar, Luis Miguel Victoria y Blanca Pérez Viramontes -además de la propia Marisol Galindo a la que le toca, como dice la subdirectora de cultura, Evelia Sandoval, comadre de la maestra Elba Esther Gordillo-, acaba de sumárseles Francisco García Culebro, con más de treinta años de cacicazgo moral de la sección VI “Estancias de bienestar y desarrollo infantil”, bajo el pretexto que su hermano Carlos Fermín no es bien visto por nadie -incluidos sus hijos Francisco Enrique y Eric Arturo. En dos años de gestión, Rodríguez Camacho ha privilegiado a sus amigos que no representan a nadie, como su secretario particular, Enrique Tenorio -con un salario de 35 mil pesos mensuales en el sindicato y quien perdió la sección de Campeche-, Roberto Ruvalcaba Reyna -perdedor en las dos últimas elecciones en el Hospital Regional “Adolfo López Mateos- y Marco Antonio Silva de quien dos -de tres- hijas gozan de comisión sindical. En efecto, además de Gloria Marlene Silva Gallardo -con plaza de médico especialista A, pese a ser psicóloga-, también goza de los beneficios de cobrar quincenalmente su sueldo sin tener que presentarse a trabajar desde que ingresó al ISSSTE en 2004, Denisse Karem Silva Gallardo, quien ocupa una plaza de archivista clínico -lo que habla de irregularidades que deben ser investigadas, porque esa plaza es inexistente en su centro de adscripción- en la Estancia de Bienestar Infantil número 130 de Matamoros, con clave de puesto MO3019-277… ¿Se le renovará la licencia sindical a la doctora Adriana Rodríguez de León -concluye el próximo 30 de junio-, luego que quien convenció a Rodríguez Camacho para que la aceptara, riñó con quien le pidió el favor?¿O podrán más las dos plazas que le mantienen en la Caprepol?…

SUTGDF: Botín que Amenaza las Pasiones


La pretensión del Gobierno del Distrito Federal de imponer la candidatura de Juan Ayala Rivero a la dirigencia sindical de más de cien mil trabajadores de base se ha traducido en una profunda división que amenaza con desbordarse. El dirigente saliente Enrique Hanff Vázquez fue el primero en oponerse a la propuesta.
El director de desarrollo de personal y política laboral, Justo Federico Escobedo Miramontes y el director de relaciones laborales, Flavio Ramírez León, tienen a su cargo la encomienda de que Ayala Rivero ocupe la presidencia del Sindicato Único de Trabajadores del Gobierno del Distrito Federal (SUTGDF) a partir del 11 de julio próximo.

Para alcanzar el propósito, aseguran que tienen el apoyo de 35 secciones de 39. Pero hay un detalle: por lo menos una docena de esas secciones impulsan la propuesta de que el candidato sea un secretario general o que en su defecto aceptan que Ayala Rivero ocupe la presidencia pero ellos definan la distribución de las carteras del comité ejecutivo general.
El miércoles 6 de abril fueron convocados a la oficina de Escobedo Miramontes para, supuestamente, anunciarles la candidatura de Ayala Rivero. En una reunión previa antes de arribar al séptimo piso de Fray Servando Teresa de Mier número 77 votaron si estaban de acuerdo en asistir. Ahí se puso de manifiesto que no hay unanimidad en cuanto a quien el gobierno de la ciudad pretende imponerles como dirigente sindical. Al final descubrieron que oficialmente no habían sido llamados.
Un error de Ayala Rivero, al plantear que ni Ricardo Anguiano ni Álvaro Dethor formen parte de la siguiente dirigencia sindical, prendió la alarma en el grupo de Hanff, situación que pudiera torpedear su postulación, debido a que forman parte de la corriente Izquierda Social que lidera Martí Batres Guadarrama, secretario de Desarrollo Social y uno de los precandidatos de Andrés Manuel López Obrador a la jefatura de gobierno para las elecciones de 2012.
Ese grupo -al que aparentemente se sumaría Izquierda Democrática Nacional que lidera René Bejarano-, busca generar condiciones que le permitieran a Aarón Ortega Villa ser el candidato o en su defecto a Miguel Ángel Patlán. Para lograrlo, pretenden explotar la cercanía que Ayala Rivero mantuvo hace unos años con el senador del PAN, Federico Döring.
Quizá por esas circunstancias, el viernes siguiente Miramontes Escobedo dejó entrever que analizan un escenario en caso que la precandidatura que impulsan no se consolide. De acuerdo con esa perspectiva, sólo dos secretarios generales en funciones reúnen el requisito de haber formado parte de la dirigencia sindical.
Otro error de Ayala Rivero pudo haber sido que el lunes 11 de abril se reunió con el director de Recursos Humanos de la Secretaría de Finanzas, José Luis García Martínez, buscando que le disciplinara a los dirigentes de las secciones 11, 30 y 39. Sólo que además de que el funcionario forma parte del grupo de Mario Delgado, distanciado de Miramontes Escobedo y Ramírez León, circulan copias de una denuncia de venta de plazas -25 mil los interinatos y a 70 mil las de base- en la que es señalado por Luis Israel Medina Mosqueda.
La precandidatura de Ayala Rivero, al parecer tiene como principal apoyo al presidente nacional del PRD, Jesús Zambrano, quien habría generado condiciones para que fuera el único considerado por el gobierno de Marcelo Ebrard para ocupar la posición.
El parentesco con el dirigente de la Federación de Sindicatos de Trabajadores al Servicio del Estado (FSTSE), Joel Ayala Almeida -es su sobrino- no ha jugado hasta ahora ninguna influencia en el relevo de la dirigencia sindical.
Las expectativas es que la postulación a la presidencia del SUTGDF ocurra en los siguientes diez días.
PARA LA AGENDA
Marisol Galindo la única con liderazgo en el Sindicato Nacional de Trabajadores del ISSSTE, sigue consolidándose frente a la apatía y mediocridad de José Luis Rodríguez Camacho, quien en lugar de atender los cada vez mayores reclamos de los trabajadores, les rehúye a los problemas. Apenas el domingo 3 y el jueves 7 de abril, estuvo en Bogotá, Colombia, para atender una reunión de la organización Uniaméricas. La representación de la organización la llevó el secretario de Relaciones Sindicales Internacionales, Ramiro Tena. Sin embargo, fue una buena oportunidad para pasear y olvidarse del caos que impera en su organización, donde la ausencia de su trabajo ha provocado que quienes creen que dentro de dos años podrían ocupar su lugar, Luis Miguel Victoria y Blanca Pérez Viramontes -además de la propia Marisol Galindo a la que le toca, como dice la subdirectora de cultura, Evelia Sandoval, comadre de la maestra Elba Esther Gordillo-, acaba de sumárseles Francisco García Culebro, con más de treinta años de cacicazgo moral de la sección VI “Estancias de bienestar y desarrollo infantil”, bajo el pretexto que su hermano Carlos Fermín no es bien visto por nadie -incluidos sus hijos Francisco Enrique y Eric Arturo. En dos años de gestión, Rodríguez Camacho ha privilegiado a sus amigos que no representan a nadie, como su secretario particular, Enrique Tenorio -con un salario de 35 mil pesos mensuales en el sindicato y quien perdió la sección de Campeche-, Roberto Ruvalcaba Reyna -perdedor en las dos últimas elecciones en el Hospital Regional “Adolfo López Mateos- y Marco Antonio Silva de quien dos -de tres- hijas gozan de comisión sindical. En efecto, además de Gloria Marlene Silva Gallardo -con plaza de médico especialista A, pese a ser psicóloga-, también goza de los beneficios de cobrar quincenalmente su sueldo sin tener que presentarse a trabajar desde que ingresó al ISSSTE en 2004, Denisse Karem Silva Gallardo, quien ocupa una plaza de archivista clínico -lo que habla de irregularidades que deben ser investigadas, porque esa plaza es inexistente en su centro de adscripción- en la Estancia de Bienestar Infantil número 130 de Matamoros, con clave de puesto MO3019-277… ¿Se le renovará la licencia sindical a la doctora Adriana Rodríguez de León -concluye el próximo 30 de junio-, luego que quien convenció a Rodríguez Camacho para que la aceptara, riñó con quien le pidió el favor?¿O podrán más las dos plazas que le mantienen en la Caprepol?…

martes, 5 de abril de 2011

*Sindicato del ISSSTE, Entre la Mediocridad y la División


 VERÓNICA V. GONZÁLEZ Y ARNOLDO PIÑÓN

En abril de 2009, cuando José Luis Rodríguez Camacho fue postulado candidato a la dirigencia del Sindicato Nacional de Trabajadores del ISSSTE, Marco Antonio Silva Hermosillo declinó públicamente su pretensión de buscar el liderazgo. En realidad nunca tuvo posibilidades de obtener la postulación.
Silva Hermosillo era, entonces, líder moral de la sección del SNTISSSTE en Tamaulipas, posición que mantuvo durante años. Sólo dos meses más tarde y pese a las marrullerías -como aumentar artificialmente el número de trabajadores para tener dos delegados más al congreso y sacar a sus simpatizantes para que no hubiese quórum-, su candidato a la secretaría general, fue derrotado por Carlos Fernando Hernández Gómez.

No obstante la pérdida del poder, la hija del ex líder moral seccional, Gloria Marlene Silva Gallardo goza no sólo de comisión sindical, sino que ocupa una plaza de médico especialista A adscrita a la clínica hospital Matamoros con un salario mensual de 14,816 pesos. El problema es que ella no es médico y según quienes la conocen, ni siquiera vive en el país. El privilegio de no tener la necesidad de presentarse a laborar, le fue concedido por Rodríguez Camacho, quien firma las solicitudes de comisiones sindicales.
El actual dirigente de 70 mil trabajadores de base del ISSSTE, se ha perdido en la frivolidad y la mediocridad. En uno de los últimos plenos del comité ejecutivo sindical, informó que conjuntamente con el secretario general de la sección del Centro Médico Nacional “20 de Noviembre”, Francisco González Esquivel, había tenido una reunión con el director, doctor Rafael Navarro. Sólo que el dirigente seccional lo desmintió: él no lo acompañó.
La ausencia de liderazgo, se ha traducido en que a más de dos años que Rodríguez Camacho concluya su gestión, por lo menos tres precandidatos: Luis Miguel Victoria Ranfla, Marisol Galindo y Blanca Pérez Viramontes, han externado públicamente su intención de alcanzar la dirigencia. La división es un riesgo latente.
Sólo que el dirigente alienta un movimiento que considera conveniente ampliar la actual gestión sindical dos años más, es decir que en lugar de concluir en mayo de 2013, lo haga hasta mayo de 2015, además que los secretarios generales seccionales accedan al congreso nacional electivo de manera automática, esto es así pierdan las elecciones respectivas.
Los principales promotores de esas propuestas son los dirigentes seccionales del Hospital Tacuba y de Querétaro, Teresa López y Guillermo Uribe. Según esto, su pretensión es darle la vuelta a una casi segura derrota, debido a que en el caso del segundo le dedica más tiempo a sus pláticas sobre obesidad y su trabajo en la Secretaría de Salud, que atender su actividad sindical.
Olvidan que en ese sindicato hay antecedentes de intentos fracasados por ampliar la gestión. La primera fue Concepción Castañeda, quien en 2005 argumentaba que el dirigente de la central burocrática la FSTSE, Joel Ayala Almeida, la presionaba; y la última ocurrió en 2009, con Ricardo Pontigo. Ambos tenían un liderazgo real, no como ocurre en la actualidad, donde Rodríguez Camacho quizá cansado por la edad -72 años- no muestra interés en alcanzar mejoras de las deterioradas condiciones de vida de sus representados.
Durante el consejo de mitad de gestión, el cual se realizará los días 12, 13 y 14 de mayo, en la Ciudad de México, los promotores de esas propuestas buscarán ganar adhesiones. Sólo que se requeriría de un congreso extraordinario para aprobar una eventual reforma del estatuto, a lo que seguramente se opondrían, entre otros, quienes aspiran a la dirigencia y los ex secretarios generales.
Rodríguez Camacho ordenó que en la convocatoria respectiva no fueran incluidos temas que tienen un interés especial para los trabajadores, como escalafón, bolsa de trabajo y los reglamentos. Lo hizo con la intención de no abanderar justas y legítimas demandas porque son desgastantes políticamente, pese al reclamo de Olimpia Micaela Ríos Zapata, secretaria de bolsa de trabajo en los estados, durante el pleno del comité ejecutivo nacional, efectuado el miércoles 23 de marzo.
Es tradición en ese sindicato que el consejo se realice en alguna parte del interior del país, aún cuando el estatuto establece que su sede debe ser la Ciudad de México.
Aparentemente en un plan de austeridad, sólo los 48 secretarios generales seccionales serán hospedado en el hotel sede, frente al centro comercial Perisur. Los integrantes del comité ejecutivo nacional no fueron incluidos. Aún así, el tesorero Alberto Noé Berúmen, se lamentó que a él le cuesta más caro que el evento sea en la capital del país, como si el dinero fuese suyo y no de las cuotas de los trabajadores.
El debilitamiento del sindicato provocada por la actitud apática de su presidente, ha llevado a que autoridades menores del instituto ni siquiera respeten a los dirigentes.