Desarticulada la Política de Vivienda para Trabajadores

 

POR VERÓNICA V. GONZÁLEZ Y ARNOLDO PIÑÓN

La política de vivienda de interés social enfrenta, desde hace algunos años, un serio retroceso: Infonavit y Fovissste al abandonar la construcción de vivienda, dejaron a los trabajadores a merced de empresas cuyo objetivo es la obtención de utilidades sin importarles que el producto que ofertan cumpla con satisfactores mínimos.

Además, ambas instituciones tienen como prioridad garantizar primero el pago de intereses de los créditos que otorgan, sin verificar que la vivienda que financian cumpla con determinadas características. En la práctica orillan a los trabajadores, que ansiosos por tener un patrimonio para ellos y sus familias, a comprar una vivienda que al final no les cumple sus expectativas y se convierte en una pesada carga que les afecta su economía, deteriorándoles las relaciones familiares con daños irreversibles.

Un trabajador con casi treinta años de servicio y con un salario cercano a los quince mil pesos mensuales, al resultar sorteado, Fovissste le prestó 840 mil pesos, cantidad que le alcanzó para comprar una modesta casa en Ecatepec. Los problemas empezaron cuando la constructora le informó que debía pagar el cinco por ciento de escrituración, y se agudizaron cuando se dio cuenta que trasladarse de ahí a la dependencia donde labora le lleva dos horas de ida y otras de regreso.

Ese trabajador ha visto deteriorarse la relación con su familia y sus ingresos, debido a que le sale más caro el pago de transporte. Ha contemplado opciones de solución: traspasar la vivienda es la más optimista, y la peor abandonarla y rentar un sitio más cercano a donde presta sus servicios.

El anterior caso es de trabajador privilegiado, por el nivel salarial que tiene. El más alto porcentaje de los créditos que esa institución ofrece a sus derechohabientes apenas supera los 400 mil pesos, insuficientes para comprar un cuartito de azotea en algún edificio en una zona comunicada en la Ciudad de México, el financiamiento corresponde al nivel salario que tienen.

Es el caso de una trabajadora que se desempeña como jefa de departamento, quien pese a percibir un salario del orden de los quince mil pesos mensuales, ha cotizado unos cuantos años y la cantidad que le prestan no le alcanza prácticamente para nada. Tiene la opción de tramitar un crédito bancario, pero sus ingresos no le permiten pagar simultáneamente los dos préstamos.

Las tasas de interés que Infonavit y Fovissste aplican, oscilan entre el 5 y 8 por ciento anualizado, aparentemente por debajo de las que cobran los bancos. La realidad es diferente, ya que a ese porcentaje debe sumársele el aumento al salario mínimo general y burocrático, debido a que los créditos que otorgan son medidos en términos de salarios.

Lo anterior permite establecer que las dos instituciones encargadas de garantizar el acceso de los trabajadores a viviendas de interés social, cobran réditos por encima de los que algunos bancos aplican. Hace unos meses una institución bancaria empezó a ofertar a sus clientes créditos hipotecarios con una tasa de interés anual ligeramente por debajo del diez por ciento.

Infonavit cuenta con despachos de abogados que hostigan a los trabajadores morosos en el pago de sus créditos. Tienen hasta el veinte de cada mes para cubrir la parte correspondiente, pero es frecuente que ese mismo día reciban llamadas acusándolos de no haber cumplido con sus obligaciones y exigiéndoles les den el número de la referencia bancaria respectiva. Fovissste no practica ese tipo de terrorismo, pero en caso que la dependencia no les aplique el descuento respectivo, el acreditado está obligado a obtener el número de cuenta a la que tienen que realizar el depósito.

PARA LA AGENDA

La sección sindical del SNTISSSTE en Puebla, cuya secretaria general es María Cristina Hernández San Pedro, inició, hace meses, un proceso de descomposición: primero en junio del año pasado le retiró -indebidamente- la licencia sindical a la secretaria de planeación de recursos humanos, María Concepción Muñoz Sánchez, a quien en un acto que la muestra como autócrata, le pidió se retirara de las instalaciones secciones; el conflicto llegó incluso a un pleno del comité seccional. Luego, en noviembre pasado, retiró, también sin atribuciones estatutarias, de la secretaría de trabajo y conflictos al Dr. Lalo Jacinto Jorge -¿cómo explicarán ambos que en el cambio de adscripción de la Clínica Hospital de Huauchinango al Hospital Regional de Puebla le entregaron una plaza de médico especialista en medicina nuclear, cuando él es ginecólogo? Y apenas en enero pasado renunció a la secretaría general adjunta Víctor Manuel Martínez Castañeda, quien pese a ser trabajador de confianza -irregularidad que hasta ahora el comité ejecutivo nacional no ha clarificado al haber tramitado su licencia sindical-. La desintegración de la dirigencia seccional, incluye otras renuncias: el Dr. Juan Carlos Mancilla Mendieta, Marina Pelcastre Hernández, titular y adjunta de la secretaría de organización; enfermera María Elia Francisca Gutiérrez Sánchez, a la secretaría de vivienda; Alejandro Zamora Alcalá, a la secretaría de uniformes y ropa de trabajo; y el contador J. Carlos Rojas Ruiz, como representante ante la subcomisión mixta de planeación de recursos humanos. Para justificarse, la enfermera Hernández San Pedro responsabiliza de su pésima actuación a sus antecesores… Por cierto, en ese sindicato cada vez son más las voces que exigen una auditoria a la comisión nacional de auxilios, debido a sospechas de irregulares manejos de los dineros de su presidente, Francisco García Culebro, quien según esto, a base de “cañonazos” busca apoyos ante su eventual candidatura a la dirigencia… Hay quienes le han escuchado a Luis Miguel Victoria Ranfla, decir que en caso de no tener la mayoría de los delegados, se dispondría a negociar con quien sí la tenga. “Ya recibí una lección de estar afuera; ahora no me voy a arriesgar” dicen que dice, en referencia a que en 2002 el Grupo Cuicuilco -del que él, Francisco García Culebro y Roberto Ruvalcaba eran destacados integrantes y contaba con la mayoría, pero no supieron hacerla valer- perdió frente a Concepción Castañeda. Según esto, aspiraría a ocupar simultáneamente la vicepresidencia y la secretaría de finanzas y luego se quejan que les digamos caciques… ¿Cuál es el interés de José Luis Rodríguez Camacho de realizar en Coahuila una fase de los juegos deportivos? ¿A quién pretende fortalecer rumbo al congreso de mayo de 2013? ¿A quién busca debilitar?… Gaudencio Chávez recuperó la dirigencia sindical que le prestó por unos años a Georgina Pacheco. Desafortunadamente para él, hace unos días le renunciaron 48 trabajadores para buscar la integración de otro sindicato -otros dos también salieron de la organización de Verónica García-… El nombre del hermano que Angélica Rentería ingresó a laborar saltándose a quienes previamente se habían inscrito en la bolsa de trabajo del ISSSTE en Baja California, es Ricardo Rentería Ruiz, quien es auxiliar en estadística y archivo y cuya plaza ocupa desde el 16 de septiembre de 2010...